¿Qué requisitos son necesarios para ser una empresa eficiencia energética?

La eficiencia en el consumo de la energía significa un ahorro para las empresas. Los centros industriales y comerciales pueden adoptar medidas para ahorrar energía, entre las que se encuentran las siguientes:

– La reducción del consumo energético de los edificios mediante la instalación de equipos eficientes que sean de bajo consumo, o rehabilitando los existentes. Así, se pueden sustituir antiguos dispositivos e instalaciones por otros nuevos.

Un ejemplo de estas medidas, en periodos de tiempo reducidos, es el sistema de alumbrado eficiente, lo que contribuye a ser una empresa de eficiencia energética.

– Disminuir el consumo energético de los procesos productivos en aquellos centros en que se desarrolle una actividad industrial, a través de la implantación de nuevas tecnologías, que incorporan una alta eficiencia energética. La tecnología eficiente es aquella que, aplicada a las instalaciones y dispositivos, consigue no solo dar un servicio, sino que además logra un máximo rendimiento al menor coste.

– En lo que se refiere al transporte y a la movilidad, una empresa de eficiencia energética debe procurar reducir el consumo de combustibles, dotando a la empresa de vehículos eficientes energéticamente o promover entre sus operarios una conducción eficiente, rutas más cortas y realizar un mantenimiento adecuado de la flota de los vehículos de la empresa.

– Respecto al precio de la energía, la empresa debe dotarse de los medios precisos para conocer cual es el más adecuado para su negocio. Así mismo, debe elegir la potencia eléctrica que más se ajusta a las necesidades de su empresa.

– Finalmente, la empresa de eficiencia energética debe controlar el consumo responsable de la energía para ver cumplido el objetivo de reducción de su gasto. Así, debe saber en qué lugares de la empresa se consume la energía que entra, en qué horarios se produce el consumo, cuales son los picos y la cantidad de energía que se está consumiendo, etc. para observar si se está derrochando, en definitiva, saber en qué se está usando realmente la energía.